Aquí tienes una lista de dioses y diosas vampiros de diferentes panteones, con una breve descripción de cada uno, su mito y por qué se les considera deidades relacionadas con el vampirismo:
Lilith
Lilith es conocida en la mitología sumeria/hebráica como la primera esposa de Adán, quien se rebeló y fue expulsada del Edén. Después de su exilio, se transformó en un demonio nocturno que acecha a los hombres y devora a los niños recién nacidos. En algunas tradiciones, es vista como la madre de todos los vampiros o seres oscuros que acechan por la noche. Lilith es asociada con el vampirismo por su conexión con la noche, la sexualidad desenfrenada y el hecho de alimentarse de la energía o vida de los hombres y niños.
Ereshkigal
Ereshkigal es la diosa Sumeria del inframundo y reina de los muertos en la mitología sumeria. Gobernaba el reino de los muertos y era una figura temida por su control sobre las almas de los fallecidos. En algunas versiones de su mito, se describe como una entidad hambrienta de las almas de los vivos y de la energía vital. Ereshkigal, al gobernar el inframundo y estar asociada con la muerte, es vista como una figura que se alimenta simbólicamente de las almas y la vitalidad de los muertos, al igual que los vampiros.
Camazotz
Camazotz es el dios Maya murciélago de la oscuridad, la muerte y el sacrificio en la mitología maya. Habitaba en las profundidades del inframundo, conocido como Xibalbá. Camazotz es temido por su capacidad para descender de los cielos y beber la sangre de las víctimas en los sacrificios. Como dios murciélago, Camazotz está vinculado a la imagen del vampiro debido a su asociación con los murciélagos, el inframundo, y su conexión con el sacrificio de sangre en los rituales.
Lamashtu
Lamashtu es una deidad demoníaca Mesopotámica que acechaba a las mujeres embarazadas y a los niños recién nacidos, alimentándose de su sangre y energía vital. En la mitología mesopotámica, se la describe como una figura monstruosa y destructiva que succiona la sangre de los niños mientras duermen. Lamashtu es considerada una precursora de los vampiros debido a su costumbre de alimentarse de la sangre y energía vital de los humanos, especialmente de los más jóvenes y vulnerables.
Sekhmet
Sekhmet, la diosa leona Egipcia de la guerra y la destrucción, fue enviada por el dios Ra para castigar a la humanidad. En su frenesí de venganza, Sekhmet bebió la sangre de sus enemigos hasta tal punto que Ra tuvo que detenerla dándole una bebida que la embriagó para calmar su furia. Su desenfrenada sed de sangre en las batallas y su imagen como una deidad que consume la vitalidad de sus víctimas la relacionan con la figura del vampiro.
Lamia
Lamia era una reina Griega convertida en un monstruo tras ser castigada por Hera. Se la describe como una figura femenina que devoraba niños y succionaba la sangre de los jóvenes. Se dice que Lamia fue transformada en una criatura vampírica como castigo por haber amado a Zeus. Su capacidad para succionar la sangre y devorar niños, junto con su transformación en una criatura nocturna y monstruosa, la convierte en una figura vampírica en la mitología griega.
Empusa
Empusa de la mitología Griega, era una sirviente de la diosa Hécate y se la describía como una figura demoníaca que se alimentaba de la sangre de hombres jóvenes mientras dormían. Se le atribuía la capacidad de cambiar de forma, apareciendo como una bella mujer para seducir a sus víctimas. Empusa es vista como un ser vampírico debido a su hábito de alimentarse de la sangre humana y su habilidad para seducir a sus víctimas mediante el engaño.
Obayifo
Obayifo es una figura vampírica en la mitología de los Ashanti de África Occidental. Es descrito como un brujo que vive en la comunidad, ocultando su verdadera naturaleza. Se cree que el Obayifo puede succionar la sangre o la energía vital de los niños y es una fuente de desgracia para las comunidades. Obayifo es considerado un vampiro debido a su capacidad para absorber la energía vital y la sangre de los humanos, especialmente de los niños, lo que lo convierte en un ser temido.
Strix/Striges
Las Striges eran criaturas nocturnas Romanas parecidas a búhos que se alimentaban de la sangre de los bebés y niños pequeños. Según el mito romano, estas criaturas podían tomar la forma de mujeres durante el día, pero de noche se transformaban en aves sedientas de sangre. Las Striges son vistas como vampiros por su hábito de beber la sangre de los niños y su capacidad para cambiar de forma, representando el arquetipo clásico del vampiro que se oculta bajo una apariencia humana.
Kali
Kali es la diosa hindú de la destrucción, la muerte y el renacimiento. A menudo se la representa con una lengua larga y ensangrentada, bebiendo la sangre de sus enemigos para fortalecer su poder. Kali es una diosa de la guerra que también representa el ciclo de la vida y la muerte. Kali es asociada con el vampirismo debido a su imagen como una deidad que consume la sangre de sus enemigos en el campo de batalla, representando tanto la creación como la destrucción.
Tlahuelpuchi
El Tlahuelpuchi es una figura vampírica en la mitología de los nahuas en México. Se describe como un ser que tiene la capacidad de transformarse en un animal y succionar la sangre de niños y bebés mientras duermen. Este ser es comúnmente representado como una mujer que adquiere poderes vampíricos durante la adolescencia. Tlahuelpuchi es considerado un vampiro debido a su transformación nocturna y su hábito de alimentarse de la sangre de los inocentes, lo que lo vincula con el arquetipo vampírico.
Asanbosam
El Asanbosam es un vampiro humanoide de la mitología de los Ashanti. Dentro de la Mitología de África Occidental, este ser vive en los árboles y utiliza sus garras de hierro para atrapar a sus víctimas, de quienes bebe la sangre. Se lo representa con ganchos en lugar de pies, lo que le permite colgarse de los árboles mientras acecha a los humanos. El Asanbosam es un vampiro clásico en el folklore africano debido a su sed de sangre y sus ataques predatorios desde los árboles, características que lo vinculan con el vampirismo.
Draugr
Los Draugr son seres no-muertos que habitan tumbas en la mitología nórdica. Se les describe como guerreros que regresan de la muerte para proteger su riqueza o vengarse. Estos seres se alimentan de la vitalidad de los vivos, a menudo asfixiando a sus víctimas o bebiendo su sangre. Los Draugr son considerados vampíricos por su naturaleza no-muerta y por su tendencia a drenar la energía vital de los vivos, como un vampiro moderno.
Arcontes
En la tradición gnóstica, los Arcontes son seres espirituales que controlan el universo material bajo el mando del Demiurgo. Se cree que estos seres vampirizan la energía de las almas humanas, atrapándolas en el ciclo material de reencarnación. Los Arcontes son vampíricos porque se alimentan de la energía espiritual de los humanos, drenando su esencia para mantener el control sobre el mundo material, lo que los convierte en vampiros energéticos.
Vetala
Los Vetala son espíritus que poseen cadáveres en la mitología hindú. Son seres que habitan los cementerios y pueden controlar los cuerpos muertos, usándolos para sus propios fines. Además, se alimentan de la energía vital de los vivos y los muertos. Los Vetala son considerados vampiros por su capacidad de habitar cadáveres y drenar la energía vital de los vivos, una forma de vampirismo espiritual.
Civatateo
Las Civatateo eran mujeres Aztecas nobles que morían durante el parto y se convertían en vampiras al servicio del dios Tezcatlipoca. Vagaban por la tierra por la noche, buscando víctimas, especialmente niños, de quienes se alimentaban. Las Civatateo son vampíricas por su conexión con la muerte, su rol como seres no-muertos y su hábito de alimentarse de los vivos, especialmente de los niños.
Osiris
Osiris es el dios egipcio del inframundo, la muerte y la resurrección. Fue asesinado y desmembrado por su hermano Set, pero resucitó gracias a los poderes mágicos de su esposa Isis. Osiris gobierna sobre los muertos y supervisa el ciclo de la vida y la muerte. Aunque Osiris no es un vampiro en el sentido moderno, su conexión con la resurrección y su dominio sobre el inframundo lo vinculan al concepto de la vida eterna y la absorción de energía, similares a los vampiros.
Drácula
Drácula es el famoso vampiro inmortal creado por Bram Stoker en 1897, aunque inspirado en la figura histórica de Vlad Tepes (Vlad el Empalador), un príncipe rumano del siglo XV. En la novela de Stoker, Drácula es un ser no-muerto que se alimenta de la sangre de los vivos para mantener su inmortalidad. Drácula es el arquetipo del vampiro moderno, conocido por su inmortalidad, la sed de sangre y su capacidad para transformar a los humanos en vampiros, características que lo convierten en el vampiro por excelencia en la literatura y el cine.
Estos dioses y criaturas mitológicas han sido interpretados a lo largo de la historia como arquetipos vampíricos debido a su conexión con la muerte, la sangre y el consumo de energía vital, características centrales en el mito del vampiro.